FUNCIONAMIENTO
Los productos NANOPHOS fueron investigados y desarrollados con base en nanopartículas de materiales convencionales como dióxido de silicio, dióxido de titanio y otros materiales en escala nanométrica, lo que permite que las estructuras de aplicación adquieran nuevas propiedades que permanecen sin cambios durante muchos años porque su base nanotecnológica asegura su efectividad, una prolongada vida útil y no cambia sustancialmente la apariencia natural de la superficie.
En el diagrama anterior, podemos observar que la nanotecnología se integra a la superficie de manera individual hasta 10 mm en cada uno de los poros, teniendo 3 características importantes:
a) El nano tamaño del núcleo de las partículas, específicamente diseñadas para ajustar en los poros de la superficie.
b) La mitad hidrofóbica, ubicada en la parte superior del núcleo de las nanopartículas, responsable de la creación de una protección hidrofóbica que cubre los poros, capilaridades y espacios libres de las superficies.
c) La mitad de anclaje, reponsable de sujetar la nanopartícula directamente en la misma.
Los selladores convencionales estan basados en “plástico” o pequeñas moléculas base silicón (comunmente el corrosivo metilo siliconado de potasio, PMS por sus siglas en inglés) que reacciona con el dióxido de carbono atmosférico para crear una barrera impermeable. A pesar de que su acción podría parecer inicialmente eficaz, con el paso del tiempo disminuye el tiempo de vida útil de las superficies, limitando su capacidad de respiración o mediante la creación de puntos de eflorescencias (manchas blancas).
Los protectores capilares NanoPhos en lugar de cubrir la superficie con aditivos polimerizados, visten los poros, la capilaridad y la superficie libre, con componentes hidrofóbicos, dejándolos respirar. Los poros aún existen, la capilaridad aún es un canal efectivo para transportar aire y humedad, pero el agua en estado líquido no puede tocar la superficie.
Al ser base agua, el manejo de éstos protectores capilares se simplifica y versatiliza, la aplicación puede ser con brocha, rodillo, aspersor o inmersión, dependiendo de las características específicas de la superficie.
Las características anteriores, aportan otra diferencia con los repelentes e impermeabilizantes convencionales, ya que al no crear una capa polímera la nanotecnología asegura que el mantenimiento se realice sin desgastar ni deteriorar la apariencia de la superficie de aplicación.
Las superficies modificadas por la nanotecnología base agua, son mucho más resistentes a la parte “dura” de la luz solar (radiación UV) ya que la bloquea sin afectar la superficie; por lo tanto, existe una mayor protección en la superficie sin decoloraciones (efecto amarillento) o pérdida de efectividad, el sustrato es ampliamente protegido y así, no es afectado por la abrasión o uso mecánico.